Petroleros toman muelles para exigir reenganche

Los trabajadores ocasionales que prestaban sus servicios a las contratistas petroleras que fueron expropiadas no tiran la toalla. Entre denuncias, protestas y manifestaciones instan a la presidencia de Petróleos de Venezuela (PDVSA) a cumplir la promesa de incluir a los temporales en la nómina de la corporación.
Andry González, ex trabajador de Z&P, una de las empresas de servicios nacionalizadas, aseguró que las personas que laboraban bajo la figura de eventuales tomaron todos los muelles ubicados en Lagunillas -en la Costa Oriental del Lago (COL)- para exigir su incorporación a la plantilla de la estatal petrolera. Las acciones se iniciaron a las 4.00 de la mañana.
"El llamado es para el vicepresidente de la industria, Eulogio del Pino. Queremos que se aproxime a las contratistas. Él hace dos semanas atrás anunció que todo aquel que tuviera un soporte que comprobara que había trabajado en alguna de las empresas expropiadas sería tomado en cuenta para la entrega de la ficha blanca, pero hasta el día de hoy ningún ocasional ha sido considerado".
El trabajador advirtió: "Así como hemos defendido a nuestro comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías, así también lucharemos por lo que nos pertenece. Estamos peleando por algo que nos corresponde porque nosotros teníamos años trabajado para esas contratistas que fueron nacionalizadas".
Contó que en el mes de mayo, cuando se concretaron las expropiaciones, los temporales fueron sacados de los 14 muelles ubicados en la COL. "Ahora los trabajadores que están allí son los primos, familiares y conocidos de los gerentes, gente que no tenía nada que ver con las contratistas".
Luis Segovia, ex empleado eventual, denunció que "el tráfico de influencias" fue lo que prevaleció en el proceso de selección del personal que fue incorporado en la nómina de PDVSA. La situación a su juicio puso en riesgo las operaciones de la industria puesto que las personas absorbidas no tienen conocimiento acerca de las actividades.

Deudas

Román Rivas, ex trabajador de una contratista, comentó que los ocasionales no sólo fueron ignorados en el proceso de absorción a la nómina sino que la industria les quedó debiendo más de un mes de salario. "Muchos de los afectados tenemos más de cuatro años laborando en los muelles. Somos padres y madres de familia que estamos luchando por nuestros derechos, estamos angustiados, exigimos una respuesta".
Carlos Santos, ex obrero de la empresa Z&P, aseguró que los ocasionales se mantendrán en las entradas de las instalaciones petroleras hasta obtener una solución satisfactoria a su situación. "Tenemos cerradas las calles del sector (Las Morochas, en Lagunillas). El llamado es para la alta gerencia".